Ciencia y Caza

El pasado domingo 11-Mayo miembros de la Asociación para la Conservación y Estudio de la Naturaleza de Valladolid (ACENVA) han certificado la presencia del meloncillo (Herpestes ichneumon) en la provincia al hallar un ejemplar atropellado en la carretera VA-140 que surca el valle del río Esgueva.

Si bien en Castilla y León existe un dato aislado de su presencia en 1982 en la localidad de Primout (Valle del Sil, norte de León), el área con mayor número de referencias es Salamanca, donde ya fue citada su presencia en 1976 al suroeste de la provincia y también existen varios datos recientes en el sur, sureste y también en el noreste, en las Arribes del Duero. También se ha citado en el sureste de Ávila.

Pero dónde más citas se han realizado últimamente ha sido en Zamora desde las existentes en la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Culebra, pasando por el este de la comarca de Sayago en 2011 y hasta los más recientes, durante el pasado invierno, relativos a ejemplares sorprendidos en la comarca de Toro, observados en el contexto de monterías de zorro y jabalí. Diversas fuentes ya habían vaticinado que esta zona aledaña al río Duero, abundante en conejos –importante recurso para este carnívoro-, de carácter mediterráneo, surcada por varios ríos con riberas frondosas (que pueden servir de corredor en zonas agrícolas), podría ser el área desde la que el meloncillo ocupase otras zonas provinciales.

Y parece ser que así ha sido. Aunque entre Toro y Renedo de Esgueva existen más de 80 Km. ello no ha sido impedimento para la expansión de este pariente de la gineta.

Las citas disponibles de meloncillo en Zamora y ahora en Valladolid, puede que sean el resultado de una posible expansión favorecida por varias causas, entre las que se pueden citar: la colonización por matorral de muchos ecosistemas en las últimas décadas (utilizan hábitats de cobertura vegetal espesa, matorrales tupidos y lugares húmedos donde es fácil sorprender a los componentes de su dieta) y su oportunista y amplio espectro alimenticio que incluye desde pequeños conejos, huevos, aves jóvenes, reptiles, pequeños mamíferos, crustáceos, carroña, anfibios, vegetales y frutos.

Sorprende también porque es de actividad preferentemente diurna, quizás el más diurno de nuestro predadores. Comienza su actividad bien temprano experimentando una reducción en las horas centrales del día, sobre todo en el estío, para volver a incrementar su actividad al atardecer y anochecer. Sin embargo, su observación suele ser difícil dado que vive en un ambiente espeso y tupido. Suelen cazar en grupos de 5-6 individuos, aunque generalmente van emparejados.

Animal largo y con extremidades cortas. En su desplazamiento da la sensación de estar reptando más que caminando. Ojos redondos, pequeños y con pupilas horizontales. Orejas pequeñas, cola larga y rematada en un penacho. La coloración general es marrón grisácea. No es una especie originaria de la Península Ibérica, donde parece fue introducida cómo animal de compañía por los musulmanes que invadieron hace siglos nuestro país.

Extendido por todo el cuadrante sur occidental de la Península Ibérica en los últimos años su expansión ha sido bastante considerable. En Extremadura, el gobierno regional comunicó en octubre de 2013 su descatalogación como especie amenazada, puesto que desde el año 2001 estaba catalogado como de “Interés Especial” en el Anexo I del Decreto 37/2001, regulador del Catálogo de Especies Amenazadas. Aun así, en la última década había experimentado una preocupante expansión provocando numerosos daños en los cotos extremeños que desde esa fecha pueden solicitar su control y caza siempre que existan daños.

Su situación en Castilla y León aún parece distar mucho de la existente en las comunidades anteriores. Aquí sigue siendo una especie protegida y con los datos disponibles no es posible saber si las citas corresponden a ejemplares divagantes, oscilaciones demográficas favorables o la presencia de poblaciones asentadas que no habían sido descubiertas con anterioridad. Habrá que tener cautela, esperar y constatar la presencia de una población asentada o de más ejemplares para ofrecer una interpretación más ajustada a la realidad y conocer su evolución.

Fuente de la foto:

http://www.acenva.blogspot.com.es/2014/05/primera-cita-confirmada-de-meloncillo.html