Cuando quedan ya pocas fechas para el ansiado día de apertura de la general todos estamos preparando nuestro equipo y la munición, revisando botas, ropa o morral y pensando en lances y trofeos que casi nunca serían posibles si no fuese por la buena labor de nuestros perros.
Sin embargo, por desgracia, no siempre tenemos en cuenta uno de los aspectos fundamentales de la caza, que no es otro que su estado y condición.
Son muchas las consideraciones que tendríamos que hacer al respecto y valga este artículo para hacernos reflexionar al respecto y mimar como se merece a nuestros compañeros de fatiga, y todo lo que ellos llevan asociado:
- Plan sanitario.- Debemos ser especialmente cuidadosos en este sentido, revisando la cartilla o pasaportepara comprobar que el calendario de vacunación y desparasitación se encuentran al día. No debemos olvidar además que hay aspectos que destacan enormemente. Por un lado, destacan aquellos que se establecen de forma obligatoria por la legislación vigente, como la vacunación antirrábica y su frecuencia según la Comunidad Autónoma en la que nos encontremos. Por otro lado aquellos que, de no realizarlos bien pueden tener repercusiones en nuestra propia salud como las desparasitaciones o, incluso la vacunación por ejemplo frente a leishmaniosis, cada vez más frecuente. Por último además, todos ellos son esenciales para el mantenimiento de la correcta salud de nuestros perros.
Un chequeo veterinario, al menos anual, será imprescindible, puesto que además de mantener de forma correcta el plan sanitario, puede ayudarnos a detectar o prevenir cualquier problema que, de otro modo, podría pasar desapercibido para nosotros.
- Control documental.- De la mano del punto anterior, debemos revisar el pasaporte de nuestros animales y mantenerlo actualizado, no solo desde un punto de vista sanitario, sino también de los correspondientes cambios de titular si se producen. Conviene además revisar la correcta identificación del perro y su correspondiente tarjeta, así como, en su caso, el seguro. Todo ello debe estar a buen recaudo y acompañar al animal en todas sus salidas, incluidas las cinegéticas.
- Entrenamiento.- Otro de los puntos clave para evitar disgustos innecesarios es el entrenamiento previo de nuestros perros. No siempre tenemos tiempo suficiente para sacar a los animales a lo largo del año todo el tiempo que requerirían y, por ello, sobre todo al inicio de la temporada, pueden aparecer problemas físicos. Debemos saber identificar estas situaciones de agotamiento o fatiga y respetar los tiempos de nuestros perros cuando es necesario, sobre todo cuando éstos son muy jóvenes o muy viejos. Si no lo tenemos en cuenta podremos generar importantes problemas de salud que podrían incluso llegar a ser irreversibles.
Con todos estos aspectos controlados seguramente nos será más fácil disfrutar de esos momentos cinegéticos que tanto tiempo llevamos esperando ¡Buena Caza!