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Hazlo tu mismo: censo de caza menor desde el coche

04 April 2012

Existen muchas formas de realizar censos de caza menor y no son pocas las complejas fórmulas matemáticas que nos ayudan a incrementar la precisión de dichos censos. Incluso hay programas informáticos que bien utilizados nos pueden ser de gran ayuda para saber cuánta caza hay en nuestro coto. No obstante, entendemos que en ocasiones no es fácil para el cazador de a pie realizar un censo según estas fórmulas y no siempre podemos contar con un gestor para censar cada uno de los cuarteles de nuestro coto.

A continuación os proponemos una manera sencilla para censar de manera aproximada la caza menor que tenemos en nuestro coto utilizando los caminos o pistas forestales que existan en vuestro coto (¡cuidado, tendrás que pedir permiso en caminos no públicos!). Los pasos a seguir son los siguientes;

1. FAMILIARÍZATE CON LOS MAPAS DE TU COTO

Dado que hay que apuntar en un mapa la caza que se va viendo, tienes que familiarizarte previamente con los mapas de los cazaderos que vas a censar. Aunque pienses que te conoces palmo a palmo tu coto puede que sobre el mapa no sea fácil, así que gasta un poco de tiempo antes de realizar el censo.

2. ¿DE DÓNDE SACO EL MAPA EN PAPEL?

Hoy en día existen bases de datos en internet de los que puedes sacar mapas a distintas escalas. El más conocido es el "SIGPAC" del cual puedes sacar mapas para toda España o para tu Comunidad Autónoma, http://sigpac.mapa.es/fega/visor/. Pinchando y seleccionando el lugar que vas a censar podrás obtener mapas que al menos te indicarán las tierras y los límites entre distintas tierras.

3. YA TENGO EL MAPA, ¿CÓMO LO HAGO?

No hagas el censo tú solo, intenta que al menos te acompañe una persona para que cada uno mire hacia un lado, a ser posible en un ángulo de 90º desde el coche. Así abarcaréis más campo que una persona sola y si podéis ir tres o cuatro mejor que mejor. Ni que decir tiene que los prismáticos son de gran ayuda porque la visión humana tiene límites.

Con los mapas en la mano, debéis ir recorriendo los caminos que delimitan los distintos campos y no descartéis recorrer los caminos dentro de tierras más grandes. Cuidado al entrar en tierras u otros campos agrícolas; la emoción de ver caza no debe implicar meterse más de lo debido y producir daño agrícola y molestias a la caza.

Una vez localizada una pareja de perdices, conejos o liebres apuntad bien dónde se han visto y si por alguna razón se espantan indicar en el mapa hacia dónde han ido.

A poder ser, cada tierra debiera de censarse dos veces en días distintos y poder ser una vez por la mañana temprano y otra al atardecer, dado que los animales suelen ser más activos en estos momentos del día. Con dos pasadas por cada tierra podréis tener una buena idea de lo que allí hay. En el caso de los conejos y las liebres tras pedir permiso a la autoridad competente podríais realizar un censo con foco por la noche.

4. ¿Y CÓMO INTERPRETO LOS RESULTADOS?

Aunque hay que tener cuidado a la hora de interpretar los resultados, porque en ocasiones se pueden repetir conteos de animales y mucha caza que existe no se ve. Si lo hacéis bien al menos váis a poder saber el número de parejas de perdices y el número de conejos y liebres que danzan en las tierras en el momento en que hacéis el censo, así como también puede ser útil para corzos o ciervos.

Además, la mejor interpretación se puede hacer comparando con los resultados de los censos realizados en los mismos recorridos en años anteriores, de modo que, a medida que pasa el tiempo, el valor de los datos irá aumentando notablemente y podremos aprovecharlos más eficazmente.

5. ¿EN QUÉ MOMENTO DEL AÑO HAY QUE HACERLO?

Aunque los censos en caza menor se pueden realizar en cualquier momento del año, hay dos períodos idóneos para aprovechar al máximo nuestro esfuerzo;

- Finales de invierno, inicios de primavera: cuando las siembras de cereal tienen poco más de 10 cm suele ser bastante fácil diferenciar a la caza. Ideal en el caso de las parejas de perdiz y las liebres.

-Finales de verano, incios de otoño: en este caso tras la siega es más fácil identificar las polladas de perdices.





Pablo Pereira. Retratos de Fauna
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