Ciencia y Caza

Recientemente hemos conocido que la Junta de Castilla y León ha aprobado un Decreto para la regulación del “examen del cazador”. El examen se asemeja a los ya existentes en otras Comunidades Autónomas, siendo de tipo test y estando exentos de él todos los cazadores que hayan tenido licencia en los últimos cinco años.

Tanto cazadores como federaciones y asociaciones cinegéticas han demandado históricamente pruebas que regulen la práctica de la caza, habida cuenta de que no es sólo cuestión de empuñar un rifle o escopeta; hay otras “cosas” que también deben conocerse. Los temarios de estos exámenes, como el de Castilla y León, incluyen aspectos relativos a las especies cinegéticas y protegidas, legislación y modalidades de caza permitidas. Más de uno pensará ya saber “casi todo” y argumentará que el “galimatías autonómico” acaba siendo insufrible para el contribuyente, pero nunca es tarde para ponerse al día y además, la “licencia interautonómica de caza”, que pretende facilitar los trámites administrativos a todos aquellos cazadores que practican su afición en varias Autonomías, comienza a ser una realidad.

Pero, ¿en qué consiste el examen del cazador? En la web www.cazalastmoment.com nos ofrecen un resumen muy útil sobre la normativa en Castilla y León. Se trata de una prueba anual e idéntica para las nueve provincias, consistente en un tipo test de 20 preguntas y de una hora de duración. Cada respuesta acertada valdrá 1 punto, las respuestas en blanco restarán 0,10 puntos y las incorrectas 0,25 puntos. Para superar el examen, es necesario alcanzar un mínimo de 10 puntos. El temario está disponible en la página web de la Junta de Castilla y León www.jcyl.es/cazaypesca.

Una de las modalidades de caza más populares en Castilla y León, que se explica en el temario, es la caza a rececho, definida como modalidad practicada por un solo cazador, quien provisto de medios de caza autorizados, de forma activa y a pie efectúa la búsqueda, seguimiento y aproximación a la pieza de caza mayor con el fin de capturarla. En la práctica de esta modalidad solamente se autorizará el empleo de perros para el cobro de piezas heridas y siempre que su suelta se efectúe después del lance. Hablar de rececho en Castilla y León es hablar del corzo, especie emblemática para esta Comunidad, tanto por el número de corzos abatidos como por la calidad de los mismos. Es amplia la oferta en este sentido, encontrando incluso ya portales web especializados en ello, como www.cazalastmoment.com, que dispone de recechos de corzo en esta Comunidad Autónoma.