Es posible que los bebederos sean una de las medidas de gestión cinegética más utilizados en el campo español. No en vano, la mayor parte de la Península está sujeta al clima mediterráneo que se caracteriza por un período seco coincidente con el verano, pero que también puede extenderse a la primavera y el otoño.
No obstante, en los últimos tiempos han surgido voces que ponen en duda la utilidad de los bebederos, entendiendo que la caza y la fauna silvestre pueden "acostumbrase" a ir a beber en vez de buscar el agua. La clave, como siempre sucede en la gestión cinegética, está en determinar cuándo puede ser necesario la utilización de esta medida, algo que no siempre se hace a nivel práctico.
¿ES SIEMPRE NECESARIO UTILIZAR BEBEDEROS ARTIFICIALES?
No, antes habrá que estudiar cada caso concreto en nuestro coto. De existir fuentes naturales de agua que no "se sequen en verano" habrá que cuidar estas fuentes frente a la colocación de bebederos. ¡Ojo!, también hay que saber identificar las fuentes de agua. Un cultivo de regadío en verano puede ser un gran bebedero para mucha fauna.
¿CÓMO PUEDO SABER SI ES NECESARIO COLOCAR BEBEDEROS?
Contando con la ayuda de un técnico de campo, deben de "patearse" los cuarteles de caza y determinar si las fuentes de agua (ríos, arroyos, manantiales, charcas, fuentes...) que abrevan a la caza y otras de especies durante el verano pueden llegar a secarse o no. Si se identifica una situación de riesgo, es decir, que posiblemente no haya agua en un determinado momento, habrá que plantearse la colocación de bebederos en una densidad suficiente y siempre facilitando el aprovechamiento por toda la fauna.
EN CASO DE SER NECESARIOS, ¿QUÉ TIPO DE BEBEDERO UTILIZO?
Hay muchos tipos de bebederos, pero a grandes rasgos podemos citar dos tipos: aquellos que se asemejan a las fuentes naturales de agua pero que se mantienen artificialmente (como una charca artificial) y los que son plenamente artificiales.
Por lo general, tanto la caza mayor como la menor puede aprovechar ambos tipos de bebederos pero hay que tener en cuenta que el aprovechamiento puede ser muy dispar en dependencia del tipo de bebedero y la especie. Dicho de otro modo: no esperemos que un ciervo aproveche un bebedero diseñado para perdices.
¿CUÁLES SON LOS PROBLEMAS MÁS FRECUENTES DERIVADOS DEL USO DE BEBEDEROS?
No son pocos los problemas derivados del uso de bebederos, pero los más frecuentes según lo que nos dicen los estudios son;
1. Ausencia de uso por parte de las especies cinegéticas, principalmente por un mal diseño y emplazamiento que hace que la caza rechace utilizarlos como abrevadero.
2. Riesgo de depredación, bien porque se colocan en densidad insuficiente y los animales se ven forzados a realizar grandes desplazamientos, bien porque los depredadores pueden identificarlos y utilizarlos para acechar a sus presas.
3. Riesgo de intoxicaciones y contagio de enfermedades, por la presencia de algas y microorganismos en el agua. Aunque estos problemas aún no han sido demostrados en España, hay trabajos científicos que sí lo demuestran en Estados Unidos y África.
A MODO DE CONCLUSIÓN
Piensa bien si tu coto va a necesitar bebederos y en caso positivo, realiza una colocación correcta y un control minucioso. Ni que decir tiene que para esto deberás contar con un técnico de campo que te ayude en la toma de decisiones.