Buscar el orígen de las especies es siempre difícil, pero a su vez fascinante. Saber cuándo y cómo una especie llegó a un lugar entraña curiosidad, especialmente cuando es el ser humano el que está detrás.
Son muchos los ejemplos de animales que han sido movidos de un lugar a otro (lo que conocemos como translocación), en muchas ocasiones asentándose con éxito y en otros no tanto.
El origen de las liebres y conejos de monte de las Islas Baleares siempre ha sido de gran interés para investigadores interesados en la filogeografía, ciencia que estudia la distribución geográfica de las especies a lo largo de la historia.
Un estudio firmado por Seixas y colaboradores comparó la genética de los lagomorfos en la Isla de Mallorca frente a la genética de las mismas especies en la Península Ibérica y Francia.
Las liebres de Mallorca son Lepus granatensis "a secas", y los autores no apoyan la teoría de considerar a estas liebres como una subespecie (Lepus granatensis solisi), algo que había sido sugerido por otros autores en estudios anteriores.
Estas liebres parecen ser originarias de Zaragoza y Cáceres y habrían colonizado la isla hace 4.000-72.500 años antes de Cristo. En el caso del conejo de monte, se confirmó que la especie es Oryctolagus cuniculus cuniculus (originario del Este Peninsular y Francia), no siendo por tanto la subespecie "algirus", identificándose varios lugares como fuente de animales para la isla: Zamora (en concreto Benavente), Zaragoza, Lleida y Francia.
Los conejos de monte fueron llevados a Mallorca hace 170.000 años antes de Cristo, ¡nada menos! Un ejemplo más de que las translocaciones no son algo reciente o quizás una prueba más de que hace todo ese tiempo estas islas estaban unidas a la Península Ibérica.
Referencia del artículo
Seixas, F. A., Juste, J., Campos, P. F., Carneiro, M., Ferrand, N., Alves, P. C., & Melo‐Ferreira, J. (2014). Colonization history of Mallorca Island by the European rabbit, Oryctolagus cuniculus, and the Iberian hare, Lepus granatensis (Lagomorpha: Leporidae). Biological Journal of the Linnean Society, 111(4), 748-760.