La práctica totalidad de las especies cinegéticas de nuestro país (y en todo el mundo), han sido objeto de introducciones, reintroducciones y reforzamientos poblacionales. En esta parte del artículo se pretende realizar una breve exposición de los avatares que han vivido y viven, las especies venatorias.
Si bien, estarán explicados más en profundidad en la pestaña ESPECIES y en algunos artículos específicos de CIENCIAYCAZA.
1. Muflón: extinguido en la antigüedad, se ha reintroducido en muchos países de la cuenca mediterránea a partir de unos pocos ejemplares de la isla de Córcega, con unos resultados positivos. En la isla canaria de Tenerife, se introdujo (nunca existió) adaptándose perfectamente, sin embargo, debido a su proliferación se ha convertido en una amenaza para la flora endémica (exclusiva) de la isla.
2. Ciervo ibérico: a principios del siglo pasado únicamente quedaban pequeños reductos poblacionales en el Sistema Bético y los Montes de Toledo. Sin embargo, a partir de mediados de siglo ha sufrido una gran expansión poblacional. Caracterizada por partir de pocos ejemplares autóctonos (poca variedad genética) y por la introducción de material genético alóctono, como los ciervos centroeuropeos (de mayor tamaño y mejores trofeos). La IUCN considera al Ciervo Rojo Mediterráneo como una subespecie diferente y en 1991 recomendó a las autoridades españolas a tomar medidas para su protección, incluyendo la pureza genética.
3. Cabra montés: quizá esta especie es un claro ejemplo de especie que ha sido translocada, reintroducida y reforzada. Merece un artículo más extenso y profundo.
4. Arruí: el éxito rotundo de la introducción de esta especie norteafricana en la península (Sierra Espuña) o en la isla canaria de La Palma está teñido por el impacto negativo sobre poblaciones vegetales endémicas (La Palma) o los efectos derivados de la superpoblación. Actualmente está considerada como especie invasora pero las políticas de actuación varian en las distintas comunidades autónomas.
5. Perdiz roja: varios artículos específicos han sido escritos en CIENCIAYCAZA. La costumbre de soltar perdices (independientemente de su fin), sin prestar atención a la pureza genética de las mismas es un claro retroceso y mucha atención debe prestarse a los híbridos de perdiz roja con perdiz chukar.
6. Conejo de monte: ampliamente explicado en el trabajo de Soriguer. Destaca la importancia de la variabilidad genética para que las poblaciones puedan gozar de una buena salud (más resistentes, a nivel poblacional, a determinadas enfermedades). La domesticación y los movimientos, tales como repoblaciones, reintroducciones y reforzamientos poblacionales han podido tener efectos perjudiciales en la calidad genética del conejo.
Las repercusiones negativas que tienen las intervenciones humanas en el medio son inmensas, algunas veces inesperadas, pero otras muchas previsibles. Con trabajos previos serios, cautela y sentido común podemos evitarlas.
Referencia del trabajo
SORIGUER, R., MÁRQUEZ, F.J., PÉREZ, J.M. “Las translocaciones (introducciones y reintroducciones) de especies cinegéticas y sus efectos medioambientales” Galemys, 1998 Num: 10 pp. 19-35.
Palabras clave: sueltas, translocaciones, reintroducciones, repoblaciones.