Dick Potts no fue el mejor investigador de su tiempo, ni tampoco el que más artículos publicó o proyectos dirigió. Pero dentro de los científicos dedicados a la conservación de fauna silvestre, y muy especialmente la cinegética, sí fue el más influyente de los de su generación.
Sería muy difícil resumir todo lo que Dick nos dejó, pero sí podemos compartir algunas de las anécdotas de su vida y trabajo con perdices y otras especies.
Dick demostró las negativas consecuencias de los pesticidas en la disponibilidad de insectos para los perdigones, y pese a todo fue muy admirado por los agricultores de Reino Unido, a los que se ganó por proponer soluciones prácticas pensadas para los agricultores... que finalmente fueron introducidas en la PAC.
No tenía complejos en investigar sobre temas polémicos, como el control de predadores. Por eso nunca dudó en apostar en proyectos como en de la Llanura de Salisbury, para el que empleó 8 años buscando financiación. Uno de los proyectos más relevantes de la Game & Wildlife Conservation Trust.
Y siempre insistió en la necesidad de que los cazadores se implicaran contando perdices, liebres e incluso insectos para de esta forma mejorar las decisiones de gestión.
Sin duda, un gigante cuyos conocimientos y legado siguen vivos.