El lobo es un superpredador que incluso en ocasiones puede ser un importante competidor del hombre y tener repercusiones negativas sobre él. Sin embargo, por su biología, tamaño, dinámica de población e incluso hábitat, el comportamiento del lobo, como el de otras especies también se ve afectado por la actividad humana.
En este sentido Theuerkauf y colaboradores realizaron un estudio para determinar el grado de influencia real que podía la actividad y presencia humana sobre el comportamiento de lobos europeos en Polonia. Para ello radiomarcaron ejemplares de tres manadas distintas e hicieron un seguimiento de sus movimientos en jornadas de 24 horas una vez al mes durante cuatro años para analizar su actividad y comportamiento.
Observaron que los lobos se movían durante todo el día, si bien mostraban mayor actividad al anochecer. Por otro lado, observaron que los animales no se acercaban a carreteras habitualmente, manteniendo una mayor distancia durante la noche que durante el día.
Sin embargo, analizando la actividad hum
ana en la zona, los autores señalan que la razón de que los lobos tiendan a tener patrones más nocturnos, salvo en zonas de elevadas densidades humanas, se debe más a condiciones ambientales como la temperatura o a la actividad de las presas que a la propia actividad del hombre.
Referencia del trabajo
THEUERKAUF, J., GULA, R., PIRGA, B., TSUNODA, H., EGGERMANN, J., BRZEZOWSKA, B., ROUYS, S., RADLEN, S. Human impact on wolf activity in the Bieszczady Mountains, SE Poland. Ann. Zool. Fennici. 2007, vol 44, pp. 225-331.
Palabras clave: lobo, actividad, impacto humano