La inmensa mayoría de los animales están parasitados pero, que no cunda el pánico, porque no todas las parasitosis son negativas para los animales y la relación entre parásito y hospedador en muchas ocasiones se traduce en una convivencia sin repercusiones excesivamente evidentes. Por otro lado, no siempre sucede así, sobre todo cuando se trata de animales débiles, enfermos, malnutridos o estresados por cualquier causa el efecto del parásito sí puede ser determinante para el animal afectado.
En el caso de la becada, es frecuente la observación de "gusanos" en los intestinos pero ¿Son estos gusanos perjudiciales para las becadas?
Un trabajo en el que participó Ciencia y Caza, realizado en Reino Unido por Sánchez-García y colaboradores, estudió la presencia y cantidad de estos gusanos, que se denominan cestodos y que las becadas toman de las lombrices, una de sus principales fuerntes de alimento.
Para ello se realizó una disección de 161 becadas cazadas, relacionando la presencia de los mismos con la condición corporal de cada becada. En otras palabras, se quería establecer si los parásitos hacían "adelgazar" a las becadas o no.
Se detectaron cestodos en el 90% de las becadas, y aunque la cantidad fue muy variable entre individuos, el 65% tuvo menos de 80 centímetros de cestodos (que fue la forma de calcular su cantidad). La cantidad de cestodos no estuvo influenciada por el lugar en el que se cazaron, el sexo, la edad y sus interacciones.
Pero lo que sí que se vió es que, cuando más pesada era la becada, mayor era la cantidad de cestodos. Es decir, que las becadas con mejor condición corporal, son propensas a tener más cestodos, pura y simplemente porque comen más lombrices que son las que transmiten los cestodos y por tanto el riesgo aumenta.
Según los autores, los resultados indican que es improbable que los parásitos afecten negativamente a las becadas, al menos en condiciones normales, aunque como apuntabamos al inicio, si se producen condiciones que puedan generar estrés a los animales, por ejemplo, un invierno excesivamente crudo o un verano muy seco, la cosa podría cambiar.
Y por cierto, estos cestodos no afectan al ser humano (por si a alguien se le estaban quitando las ganas de comer becada).
Si quieres conocer más sobre las enfermedades de nuestras especies de caza menor recuerda que puedes inscribirte hoy en el Curso online sobre Gestión Sanitaria y Control Veterinario de Caza Menor en el que te contaremos éstos y otros muchos detalles prácticos para contribuir a mantener o mejorar la salud de nuestras especies.
Referencia del artículo
Sánchez-García, C., Harris, E., Deacon, A. C., Bray, R., & Hoodless, A. N. (2017). Is cestode infection intensity associated with decreased body condition in the Eurasian woodcock Scolopax rusticola?. Journal of Helminthology, 1-7.